Poniendo mi experiencia a trabajar
Yo he sido parte de la educación pública, desde mi llegada a los Estados Unidos en el año 1986. Asistí a las escuelas del Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles. Al graduarme de la preparatoria, asistí a la Universidad de la ciudad de Northridge (CSUN). También formé parte de Youth Services de LAUSD. Este programa me dio la oportunidad de trabajar y apoyar a estudiantes de primaria que necesitaban ayuda después de clases. Toda mi edad adulta la he dedicado al servicio de los demás, tanto como miembro de la Marina estadounidense como docente en las escuelas públicas.
Actualmente, soy maestro de español con diecisiete años de experiencia. Además de mi experiencia laboral en las escuelas públicas, mis hijas también son estudiantes de escuelas públicas del Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles. Por lo tanto, conozco personalmente el significado e impacto que las decisiones del consejo escolar crean a nuestros estudiantes, padres y maestros.
De estudiante, viví las consecuencias e impacto de estas decisiones, desde el punto de vista de aprendiz de inglés y estudiante de programas de Magnet. Conocí la efectividad de programas adecuadamente financiados en las escuelas de mi comunidad. Crecí con una madre soltera en una comunidad de bajos recursos, afortunadamente, había recursos de apoyo disponibles para los estudiantes que vivían una situación similar a la mía. Soy producto de la educación pública comprometida con el éxito de los estudiantes.
Mientras trabajaba con los estudiantes en Youth Services, fui testigo presencial de la importancia de los programas educativos que se ofrecen a los estudiantes después de clases. Estos programas ofrecen a los estudiantes un ambiente saludable, mientras participan en actividades extracurriculares en las escuelas de su comunidad. Esto es posible cuando nos damos cuenta de que el bienestar físico y emocional de nuestros estudiantes es tan importante como el académico.
Como docente trabajando en preparatorias clasificadas de bajos recursos, yo puedo observar día a día las consecuencias de las decisiones del consejo escolar y me doy cuenta de lo mucho que contribuyen al crecimiento y éxito de nuestros estudiantes los fondos y recursos en nuestras escuelas. Ya sea por medio de fondos destinados a recursos de apoyo para nuestros estudiantes con necesidades especiales, estudiantes aprendices de inglés, estudiantes en cuidado temporal o estudiantes que sufren por falta de vivienda. Existe un gran valor en hacer de nuestras escuelas públicas comunidades que tengan recursos y apoyo para todos nuestros estudiantes. A través de los años, he aprendido que nuestros estudiantes salen adelante cuando les valoramos y les demostramos que estamos dispuestos a invertir en su futuro.